lunes, 15 de junio de 2009

La Garrafa

Otro hermoso exponente de la época de los 60. Un auto ganador en muchas oportunidades conducida no solo por Viannini, sino por otros pilotos más como Peduzzi y Bordeau en sus momentos. Básicamente se trata de un prototipo construido sobre una plataforma Bergantin de la Ika por los talleres Baufer de Baudena. En esta oportunidad, bajo el capot se encuentra un rabioso Chivo 250, pero inicialmente en su época lo motorizaba un slant six de la Chrysler; también con muy buenos resultados. Digno rival de las liebres. Aquí ante mis ojos, revive perfectamente la imagen que yo veía cuando tenía 11 años. Muy bien terminada. 10 puntos.





Las hermanas se encuentran



Aquí están los dos modelos: Liebre 2 y Liebre 3. Básicamente en lo técnico son similares, la diferencia radica en que en aquella época para producir en masa un vehículo, era más fácil con el modelo 3 que el 2; puesto que el modelo 3 llevaba mucho menos mano de obra, ya que para aquellas competencias posteriores a la aparición al modelo 2, no era necesario que ciertas partes de la carrocería se rebatieran o se abrieran, porque dichas competencias tenían distintas duraciones y distintas alternativas.

Inauguración del autódromo de Junín


El ingrediente que faltaba!!!!!!!Aquí, desde el habitáculo de mi Liebre 2…….se puede apreciar, en el momento de salir a pista, como he tenido el honor de dar al menos un par de vueltas junto a La Garrafa piloteada por nada menos que Aldo Bellavignia, una Liebre 3 y mas adelante, una replica de la primera versión de La Coloradita que, en su época ha piloteado Juan Manuel Bordeau. Y……solo me faltaba hacer también porque no? Un tanto de piloto. Fue una emoción muy grande y entre el ir y venir de todo eso, pude comprobar que la pista es mucho mas ancha que la de otros circuitos. Yo nunca había manejado un auto de carrera en circuitos más que en oportunidades de ir a rescatar autos fuera de competencia y en situación de remolque…..pero hoy fue diferente,…………….. Los curvones…. son interminables y en algún momento, entre la fuerza centrifuga y todo lo que no hay que perder de vista para no irse afuera y encima, acelerar y mantener el giro, hubiera perdido la orientación, de no haber sido por el auto de adelante que me marcaba el camino; máxime siendo que tampoco conocía el trazado…Evidentemente, no es fácil ser piloto y…mucho menos…buen piloto!!!! Lejos de todo eso, sin dudas, haber sido uno de los primeros en esta inauguración en tocar la pista, ciertamente constituyo una experiencia emocionante y alucinante por demás!!!!! Y puedo sacar como conclusión que……naci para construir autos y no para correrlos!!